Lejos de ser un sueño el mejorar nuestra cultura de limpieza, la contaminación forma parte de este mundo que poco a poco se va autodestruyendo.  Mis padres no son gente muy estudiada sin embargo me educaron con una visión de mejorar nuestro mundo y mejorar como personas día a día. Me dedico a escribir poesía, para inventarme una perfecta historia y dejar de lado la realidad que es triste, que solo se que existe para todo aquel que no comprende la importancia de mejorar todos los días, de simplemente hacer de este mundo un mundo mejor. Me olvide de mi filantropía e inicie por formar un grupo ecológico en mi centro de estudios. El CET-MAR. El cual se ha convertido en el escenario de un grupo de jóvenes que realmente se preocupan por el desarrollo de sus comunidades, específicamente con el tema de la basura. Es nuestro común denominador saber que es una larga tarea esto de crear conciencia en las personas. Sin embargo tenemos presente que no hay peor lucha que la que no se hace, ni mejor guerra que la que no se empieza. Este grupo ecológico que hoy lleva por nombre (NEKIE) nuestra casa, escrito en lengua huichol, no solo pretende ir poniendo botes por las calles, o juntar basura cada sábado o domingo. Los ideales de este grupo van mas allá de crear conciencia, ayudar a los animales, a la reforestación de áreas deforestadas, sabemos que no se puede tapar el sol con un dedo, pero si al juntar muchas manos, de la misma manera es mucha la diferencia entre las manos que arrojan basura y las que se dedican a juntarla, es por esto que quiero hacerte a ti especialmente la invitación, a no tirar basura, créeme que no es tan difícil, con nadie vas a quedar mal, es cuestión de solo querer contribuir con nuestra causa y sobre todo ayudarte a ti mismo, frenando esto que es una realidad, esta contaminación que amenaza con extinguir varias especies de animales, plantas, incluso amenaza con dejarnos sin agua o más bien dejarnos con agua contaminada. Que lleva también como consecuencia, un ligero aumento a la temperatura del planeta. Tan ligero que nuestro futuro terminaría poniendo fin a la película un día después de mañana.

Esto se trata de valores, pero también de sensibilidad, de sensibilizarnos no solo ante una crisis económica, sino una crisis de un mundo sin cerebro o más bien sin conciencia. Un mundo que practica el valemadrismo como su pan de cada día.

No sé, tengo ganas de gritar que me ayuden, que se ayuden ustedes. Porque de este momento depende el futuro de muchos. En fin solo tú decides si continuamos en esta situación de valemadrismo o nos ayudas aportando tu granito de arena, simplemente no tirando basura y respetando la naturaleza en general o integrándote a nuestro grupo ecológico de manera voluntaria. También lo puedes hacer ahorrando energía, utilizar menos el coche, o tapando las ollas y cazuelas donde cocinas. Pues así desaceleramos un poco el calentamiento global.

GRACIAS.